La maragota tiene pigmentación muy variable, con predominio de tonos verdes y pardos. Sin diferencias sexuales externas. Posee labios gruesos y dientes poderosos.

Vive en zonas de algas de costas rocosas, a una profundidad de entre 0 y 30 m.

Se alimenta de moluscos y crustáceos que arranca de la roca con sus dientes.

No es una especie muy desconfiada, aunque los grandes ejemplares (más de 1,5 Kg) son bastante huidizos. Podemos pescarlos realizando un acecho, entran también a la espera y muchas veces los encontraremos en grietas. Donde será fácil dispararles.

Su carne no es muy apreciada, aunque los ejemplares grandes tienen muy buen sabor. Son también muy sabrosos en calderetas de pescado.

Receta: Guiso marinero de Maragota o Pinto

Receta: Pinto guisado