Mañana lunes llegará un barco noruego a la zona donde se hundió el Prestige, hace ya casi 5 años, provocando una marea negra que afectó las costas de Portugal, España y Francia.

 

El pasado Marzo se detectaron unas manchas iridiscentes en la zona del hundimiento, que resultaron venir del petrolero hundido. Tras una primera negativa, el Gobierno español encargó una inspección submarina para conocer el estado actual del casco y de las posibles filtraciones.

En el Siem Danis, el buque desde el cual se realizará el estudio, viajan un equipo de Repsol y dos pequeños batiscafos robotizados, que deberán bajar a casi 4.000 metros de profundidad para estudiar los restos del barco hundido, comprobar las posibles brechas y fugas y tomar muestras de agua y del lecho marino cercano al Prestige.

Una vez finalizada el estudio, que durará unos diez días en función del estado del mar, se elaborará un informe para estudiar futuras misiones para intentar extraer el petróleo que queda en el fondo. Se calcula que pueden ser unas 1.400 toneladas, mientras que otros estudios apuntan a que son entre 16.000 y 23.000.

 

Fuente: http://www.ecoperiodico.com/