Lo cierto es que, coincidiendo con las crecientes quejas de su patrona mayor, Evangelina Lago, la Consellería de Pesca decidió entregar al pósito de Vilanova una embarcación y un vehículo que "deben ser empleados para fines de utilidad pública e interés social, principalmente tareas de vigilancia y colaboración en salvamento marítimo y lucha contra la contaminación marina".

Así lo explican en la propia consellería, donde matizan que la cesión de la lancha y el vehículo todoterreno se realizan por un plazo de cinco años, prorrogables por períodos sucesivos de igual duración .

En concreto se trata de la embarcación "Faladoira", de 11 metros de eslora y 3,90 metros de manga. Fue construida en 1991 y dispone de dos motores diésel de 240 caballos de potencia cada uno. En cuanto al todoterreno, es un Suzuki Vitara matriculado hace diez años.

La propia patrona recibió formalmente estos vehículos de manos de personal de Pesca, en un acto desplegado el viernes en el puerto de Vilanova.
Responsabilidad del pósito

En las cláusulas de la cesión se establece que la cofradía vilanovesa "es la responsable de la reparación y puesta en funcionamiento" de ambos bienes, "así como la encargada de su mantenimiento para conservarlo en buen estado".

De este modo, la cofradía "responderá de su valor en caso de destrucción, robo o pérdida y tendrá la obligación de realizar un seguro de responsabilidad civil a fin de garantizar la cobertura de los daños que se pudiesen ocasionar, tanto personales como materiales".

También se contempla la posibilidad de que Pesca pueda cancelar la cesión de la lancha y el todoterreno "en el supuesto de incumplirse la finalidad por la cual fueron entregados". En ese supuesto, los bienes volverían a manos de la Xunta de Galicia.